El número de latinoamericanos con una cuenta bancaria pasó de 39% a 73% entre 2011 y 2021, según el Global Findex del Banco Mundial. Y aún así, los pagos alternativos se convirtieron en algo más sólido y relevante para el comercio de la región. Independiente de la inclusión financiera sin precedentes, en la región los pagos alternativos siguen siendo un gran negocio, lo que impulsa la innovación financiera y el e-commerce.
De acuerdo con Ebanx, los pagos alternativos alcanzaron 40% del total de pagos de comercio electrónico en la región durante 2022. Entre los pagos alternativos de más rápido crecimiento son los pagos instantáneos (transferencias), wallets e incluso el recién llegado Buy Now Pay Later, (compre ahora, pague después, por su traducción en español).
Los pagos alternativos alcanzaron picos de 50% en Colombia y 44% en Brasil, donde las transferencias han ido ganando espacio, al mismo tiempo que incrementa la adopción del e-commerce.
En mercados en desarrollo, como en Ecuador, Guatemala y Paraguay, estos métodos están aún por debajo de 30%; sin embargo, EBANX considera que esto cambiará conforme empiece la consolidación del e-commerce.
En Colombia, Brasil y México, el método más popular son las transacciones rápidas como SPEI, ellas representan 17% de uso de todos los productos en línea que existen. Detrás de este método, están las wallets digitales, con 10%. y luego las basadas en el efectivo, que son vouchers que permiten el pago en efectivo como Boleto en Brasil y Oxxo en México, con 8% del uso.
Las nuevas tecnologías están incrementando el uso de los métodos alternativos de pago y permiten nuevas formas digitales de impulsar la inclusión financiera en la región. Los países con mayor uso de los pagos alternativos son Colombia, con 50%; El Salvador, con 49% y Brasil, con 48%; México se encuentra en la quinta posición, con 34%, solo por detrás de Perú.
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