Más allá de los recientes desarrollos en el sistema bancario, en estos días la atención de todos está evolucionando en torno a un tema: Inteligencia Artificial. Echemos un vistazo.

Desde que una Startup poco conocida llamada Open AI logró llegar a 1 millón de usuarios en solo cinco días para su chatbot Chat GPT y la posterior inversión de seguimiento de $10 mil millones de Microsoft , el tiempo ha corrido rápido. La charla primordial ya no es blockchain, crypto, metaverso o web3, sino la revolución de la IA. Todos, desde los inversores hasta las BigTechs, están apostando por el vagón de la IA (de rápido movimiento).

La razón es simple: La tecnología de IA tiene el potencial de transformar los negocios en todas las industrias y sectores, de la misma manera que el vapor, la electricidad y las computadoras (y la automatización) han definido las tres revoluciones industriales que precedieron a la que vivimos actualmente: La llamada 4ª revolución industrial.

En palabras simples, la IA es la simulación de la inteligencia humana por parte de las máquinas, que ahora pueden realizar muchas tareas que antes eran realizadas exclusivamente por humanos.

Hay dos impulsores principales detrás de este desarrollo:

La abundancia de grandes cantidades de datos (llamado #bigdata), organizadas de una manera significativa y estructurada (que llamamos información) y la capacidad de acceder a ella. Según una estimación de SG Analytics, se crearon 2,5 quintillones (millones de millones de millones) de bytes de datos cada día en 2021.

Avances en la potencia de cálculo que han hecho posible procesar, analizar e interpretar estos datos a escala masiva.

Existe una interconexión y dependencia muy fuerte entre estos dos factores: La potencia informática es inútil sin datos y los datos no valen nada sin la capacidad de analizarlos. A su vez, cuantos más datos estén disponibles, más capaces (inteligentes) se volverán las máquinas. En realidad, no son las máquinas las que se vuelven más inteligentes, sino el algoritmo detrás de ellas, que no es más que un conjunto de reglas puestas en una secuencia que dictan qué acciones se toman para resolver un problema o una tarea. El resultado producido por el algoritmo es lo que llamamos un modelo. El mejor ejemplo de algoritmos (auto) adaptativos y habilidades de aprendizaje son las recomendaciones (mejoradas) que obtenemos de Amazon, Spotify o Netflix.

Ahora que se dan los avances tecnológicos, no es exagerado decir que en el mundo digital actual los datos son el nuevo oro o petróleo (que aumenta su valor cuando se procesa, al igual que el oro o el petróleo). Para ir un paso más allá, en la rivalidad entre Estados Unidos y China, los datos se están volviendo cada vez más importantes que las armas tradicionales.

A medida que la IA pasa cada vez a un segundo plano, impulsando todo tipo de aplicaciones que usamos en nuestra vida diaria, su importancia crece exponencialmente. Estamos en medio de una batalla tecnológica en curso, que tiene el potencial de redefinir los negocios globales en los próximos años. Y esa es la razón principal por la que nadie puede permitirse quedarse fuera del juego.

 

Fuente: 

https://www.linkedin.com/feed/update/urn:li:activity:7043823717172322304?utm_source=share&utm_medium=member_desktop 

¿Desea optimizar o implementar un sistema de pago? Uno de nuestros expertos lo asesorará

Colombia: Hub digital

Colombia se está convirtiendo en ‘hub’ de talento digital para las multinacionalesHay un título que los colombianos quieren llevar con orgullo: el...

Perfiles tecnológicos más demandados

Incremento de la demanda de profesionales vinculados a las nuevas tecnologías Las empresas latinoamericanas están pisando el acelerador de la...

El Centro de Competencias de FirmWare y sus capacidades para el desarrollo de software

El Centro de Competencias de FirmWare y sus capacidades para el desarrollo de software Un gran trabajo en equipo requiere algo más que grandes...

10 + 3 =

× Habla con Lorena